En el encuentro celebrado en Barcelona el pasado veine de septiembre por la Fundación Ananta bajo el lema "Contigo somos más Paz". Una de las intervenciones fue de la índia Jayanti Kirpalani pronunció un discurso sencillo y claro que transcribo ya que es hermoso y para meditar:
"A veces, olvidamos el impacto que una persona de paz puede causar sobre los demás, una persona pacífica compartirá todas sus vibraciones sobre las demás, si todos compartiéramos esas vibraciones esa energía se repartiría por la ciudades y convertiríamos los pueblos del mundo en el mundo de la paz. Pero, ¿dónde empieza la paz? ¿Empieza con el gobierno que está firmando constantemente tratados de paz y cooperación con el resto de las naciones del planeta?. Durante siglos los gobiernos lo han hecho y aún así, no somos capaces de alcanzar la paz en el mundo. En los últimos sesenta años ha habido más guerras que en las épocas anteriores.
Quizás, hayamos olvidado o no sepamos que la paz empieza por uno mismo, se empieza por aplicárnosla a cada uno de nosotros, dicho de otro modo, la paz empieza en mí. Cuando permitimos que la paz aflore como valor fundamental en nuestro corazón, entonces empezamos a experimentar esa paz. Cuando estamos llenos de buenos deseos y de buenos sentimientos hacia los demás es cuando la paz puede habitar en nuestro corazón.
Si tuviéramos una máquina que nos permitiera ver los sentimientos que alberga nuestro corazón, ¿qué es lo que creéis que veríamos?, seguramente veríamos que nuestro corazón tiene algo de polución. Encontraríamos algunos sentimientos no tan nobles como deberían de ser, también algunos pensamientos no del todo correctos por decirlo de alguna manera y por último, también podríamos encontrar algunos pensamientos y sentimientos más o menos nobles. La paz en mí corazón comienza teniendo paz en mis pensamientos primero, cuando permito que mi mente piense pensamientos nobles, pensamientos elevados mi mente retorna a la paz.
Cuando tengo pensamientos sobre el Ser Eterno; y empiezo a ver el Ser Eterno en todas y cada una de las personas entonces no veo divisiones entre género, color, raza, etc. Ni las diferencias de personalidad. Pero lo que veo es la bondad y la especialidad de cada una de las almas humanas y entonces mi corazón se llena de buenos sentimientos hacía todas las personas. Así que cada día empecemos limpiando el corazón, como cuando tomamos una ducha al levantarnos para que nos refresque y nos dé energía para comenzar el día. Empecemos el día limpiando todos los sentimientos que tenemos acumulados en nuestro interior, llenándolo de buenos pensamientos y buenos sentimientos para todas las personas con las que me relaciono y con las que tengo a mí alrededor.
También debo de crear un sentimiento de paz y de satisfacción conmigo mismo porque si no estoy en paz conmigo cómo voy a estarlo con los demás.
Tan a menudo pensamos en las cosas que nos gustaría tener y si la paz es una de ellas, entonces actuemos cada mañana de la siguiente manera:
Cada mañana, empieza el día con una lista de todo aquello que tienes que agradecer, todo aquello que ya está como una bendición en ti y que agradeces. Así, empiezas el día satisffech@ contigo mism@ y en paz con el Creador."
Sencillas y a la vez bellas palabras que nos tiene que hacer reflexionar. Aquí os pongo el enlace para que podaís ver el vídeo si os apetece. http://www.youtube.com/watch?v=tq3V0zk37fQ.
Un saludo para todos queridos amigos y amigas.
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